En nuestra entrada anterior del Blog tratamos los alimentos cariogénicos, que son aquellos más propensos a producir caries. Ahora bien está claro que para prevenir la caries debemos evitar consumir estos alimentos, pero, ¿qué más debemos hacer?
En esta entrada del blog os daremos otros consejos a seguir.
El primero de los consejo será la higiene oral. Además del cepillado, después de cada comida, es necesario utilizar el hilo dental y el enjuague. Una cosa tan básica como el cepillado, no parece complicado, pero debemos llevar a cabo un cepillado correcto. Para hacer de nuestra limpieza algo completo, el hilo dental llega a los lugares donde no lo hace el cepillo, y, por último, el enjuague o el uso de flúor ayudan a nuestro esmalte, el gran enemigo de la caries.
El segundo de nuestros consejos, evitar el consumo de alcohol y de tabaco. El tabaco se considera un gran enemigo, pues altera el equilibrio del microbioma de nuestra boca, este mundo interior formado por unas 600 bacterias que se ve alterado por el consumo de tabaco y que puede provocar, como poco, el inicio de la caries.
El tercero, llevar una dieta equilibrada y un bajo consumo de azúcares. En la actualidad numerosos alimentos están compuestos por un alto contenido en azúcares, que provoca que las bacterias, que componen la placa, produzcan un ácido que daña las piezas dentales.
El cuarto, el control dental, que supone la visita al dentista u odontólogo, que en el caso de que descubra una caries realizará el tratamiento que crea necesario en cada caso.
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